Grupo de Senderismo del SUC.
Asociación federada a la Federación Cántabra de Montañismo y Escalada
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Nota.

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miércoles, 20 de abril de 2011

AL TORAL POR EL ARROYO DE LAS VARAS

Domingo, 17 de abril de 2011.

Al Alto del Toral se puede subir desde varios sitios. En esta ocasión (es la tercera), lo hemos hecho desde la misma Casa del Monte, de Ucieda.

Merece la pena hacerlo desde cualquier sitio por las vistas que este Alto ofrece. Situado en el occidente de Cantabria, girando la vista alrededor, y en un día despejado, recorres Mozagro, Íbio, la Sierra del Escudo, la del Cuera, Ozalba, Arria, Picos de Europa, Sierra de Peña Sagra, al fondo Peña Prieta y Curavacas, Alto Campóo, Picos Jano y Ureño, Mediaju Frío, Castro Valnera, Picón del Fraile, Porracolina… y los intermedios de Obios, Cildá, Espina del Gallego, Berana… y más cerca, Cueto de la Forcá, Tordías, Brenes, El Cuervo… Si el día no está muy claro resulta más difícil distinguir las cumbres del Oriente de Cantabria, la ciudad de Santander, pero se adivinan si se tiene un poco de sentido de la orientación.

Partimos, esta vez, como decimos, de la misma Casa del Monte, cruzamos un puente que está unos metros antes y tomamos un camino que, dejando, a la izquierda, un invernal, va acompañando, cauce arriba, al arroyo de Las Varas, casi siempre a nuestra derecha, salvo alguna vez que hay que vadear y pasar al otro lado. Así vamos cogiendo altura, en medio de un bosque de galería, donde, en días como éste, con sol, la luminosidad es grande y las tonalidades de verde innumerables.

Casi en la cabecera del arroyo, el camino tuerce, bruscamente, a la izquierda, llanea un tanto, hasta pasar por encima de un imponente invernal, en medio de una magnífica braña. A poco de dejar atrás el invernal, topamos con un estacado y giramos a la derecha, siguiendo la alambrada hasta que desaparece, junto a una pared medio derrumbada, por la que entramos en una amplia braña. A partir de aquí, el bosque propiamente dicho termina, quedando, únicamente, pequeños grupos de árboles. En uno de los últimos paramos para repostar e hidratarnos un poco. Estamos ya en campo abierto.

Frente a nosotros tenemos el primer alto, El Cabio y optamos por bordearlo por su derecha. A continuación, encaramos el Cuetu del Arenal, El Cotero Lobo para terminar en el Alto del Toral, todo ello por terreno despejado, con amplias vistas, disfrutando de sol y de suave brisa. Tan es así que, como nos sobraba tiempo, optamos por relajarnos un poco, haciendo un alto para disfrutar del buen tiempo que nos acompañaba.

Del mismo Alto del Toral, girando en perpendicular, a la derecha, se inicia una fuerte pendiente, en dirección Sur, flanqueada por un estacado, hasta llegar al primer rellano en que cruzamos al otro lado y buscamos una senda que nos lleve en dirección Oeste, siguiendo otro estacado, hasta Las Urizosas, una zona despejada, pedregosa y, en parte, lagunosa, encima de la cual, entre los árboles, se encuentra un refugio que nosotros dejamos de lado.

Siguiendo siempre en esa dirección, y después de pasar al otro lado del mencionado estacado, buscamos una pista que desciende hacia un cruce de caminos, lugar en que están indicadas las distintas direcciones a seguir. Nosotros escogemos la que nos llevará a la Casa del Tío Mero y Casa del Monte, final del circuito.

En total, el recorrido es de unos catorce kilómetros, salvando un desnivel de 650 mts. aproximadamente.

Esta es la localización de la zona

Y este el esquema de nuestro recorrido

Pasamos el puente. A la izquierda se abre una braña en la que está el invernal de Lusnada

A nuestra derecha, el arroyo Las Varas, poco antes de verter sus aguas en el Bayones

No podemos pararnos en todo los atrayentes rincones porque no llegaríamos nunca a nuestro destino

Uno de los vados

Cuánta madera! diría Maxi, cuánta leña para la chimenea!

La luz penetra entre los verdes del bosque  como si fuese a través de las vidrieras de una catedral

El camino ha girado a la izquierda, abandonando el cauce del arroyo

Por la izquierda entraríamos a la braña del invernal. Seguimos por la derecha

Pasamos por encima de esa imponente cuadra

Y llegamos al primer estacado, que seguiremos a nuestra derecha

Por esta cerradura, medio derruida, entramos en una amplia braña

Donde disfrutamos, desperdigándonos por el amplio espacio

Nunca acabas de sorprenderte de lo que ofrece la generosa Naturaleza

El Cabio, nuestro primer altozano

Que bordeamos, a media ladera, por la derecha

Atravesando una braña más, nos enfrentamos al Cueto del Arenal, dejando a su izquierda el Alto de Castro Cerezo

La altura nos regala con las primeras vistas panorámicas

Por estacados que no falten.

Al fondo, a la derecha, la Sierra del Escudo, entre la bruma, Ozalba, a la izquierda Picos de Europa

Último tramo hasta El Toral. Al fondo, a la izquierda, Mozagro

Relajo total para aprovechar el momento, el sol y la brisa

Bajamos a cuchillo, junto a la divisoria entre Cieza y Ucieda

Si desde arriba impone, desde abajo asusta

Hemos pasado al otro lado de la alambrado buscando una senda en dirección Oeste

Topamos con otro estacado que seguimos hacia nuestra derecha

Avanzamos por el borde alto del bosque

Hasta llegar a Las Urizosas, dejando de lado el refugio que nos vigila, escondido, entre los árboles 

En este entorno, cualquier sitio es bueno para descansar, a la sombra, y comer, si se tiene hambre 

 Árboles muy importantes puede que haya en otros sitios, pero tan importantes y, sobre todo, tantos juntos, como en  Ucieda, es difícil

 Atravesamos el último estacado, adivinando que, la pista que buscamos, está cerca

 Llegamos al esperado cruce y tomamos dirección a nuestra derecha

 Como indica el letrero, a La Casa del Monte

 El último tramo, sin nada que dilucidar, como siempre, se nos hace largo y algo aburrido, a pesar de lo agradable de la tarde